MOONROSE CP-9

Capitulo 9:" La Verdadera Luna" Parte I

-¡¡¡¡No me puede arrebatar a mi hijo!!!!- grita un padre desesperado- mocoso de mierda di algo la puta que te parió, te vas a arrepentir…-

Frank solo baja la mirada mientras su padre es condenado por maltrato, tráfico y consumo de drogas…

-Te dije que me encargaría de ti…-

-Pero ahora estaré en un orfanato mientras cumplo los 18…-

-No, no será necesario. Faltan pocos meses para que los cumplas, el juez Correa es un buen amigo arreglare tu custodia, estarás a mi cargo-  se acercó más a su odio para que solo el escuchara -Y harás todo lo que yo te pido-  su lengua resbalo atraes de su oreja, un escalofrió lo recorrió de pies a cabeza.

-Se paró de los asientos, se dirigió al juez el cual estaba sentado en una cómoda silla al frente de todos, le susurro algo, el juez río amablemente y firmo unos papeles que Gerard entrego.

-Nada que un buen amigo de la secundaria no pueda hacer…- dice Way mientras le muestra unos papeles a Iero.

-¿Que es..?- pregunta algo incrédulo.

-Gracias a esto estarás atado a mi hasta que termines todos tus estudios seas o no un  mayor de edad…-

Los ojos de Frank se cristalizan, un sueño más se completara gracias a Gerard.

-Gracias…- un brillo estalla en sus ojos algo cristalizados.

-¿Mejor vamos a casa si?- Iero asiente su cabeza con una sonrisa que cubre su rostro, algo aniñado.

-- 

El sol esta brillante, en la radio se informa la hora, apenas son las 10:30 de la mañana el viento juego con los cabellos de Gerard. Siempre de traje, una distintiva  corbata roja resalta sobre su traje negro. Su cigarrillo esta encendido, sus labios detienen la colilla de este.

Frank solo ve a la gente ir y venir a través de las calles corriendo sin fin. Una camisa blanca con unos  pantalones negros nada formal, por lo contrario su informalidad  acompaña su edad.

Aún sigue siendo un adolescente, que está pasando por mucho pero que a pesar de eso no deja de serlo.

Pararon en un café-bar estaban algo hambrientos por los nervios del juicio, no comieron.
Se sentaron en una mesa algo aislada.

-¿Señores que se les ofrece?- pregunto una hermosa mujer de cabellos largo negros como las sombras, contrastaba brutalmente con su piel blanca como la nieve.

-Un cortado..- pidió Frank.

-Un café…- ordeno Gerard.

-¿Algo, para comer?-

-Pastelillos de crema….- pidió Gerard.

-En seguida…-

-Te has dado cuenta que Pansy está cambiando de pelaje, su cabello esta más blanco de lo normal tendríamos que llevarla al veterinario.- comento Frank.

-¿Enserio? No me había dado cuenta, encárgate vos  honey, esta semana estaré algo ocupado arreglando algunas cosas…-

-Gustoso…- le sonrió sus miradas se cruzaron por alguna razón, cuando lo hacían solían quedar en la nada todo a su alrededor desaparecía,  podían ver el interior del otro, esto asustaba en cierto sentido  a Frank sentía que se perdía, odiaba sentirse perdido pues he de recordarles que Frank desde muy chico ha sufrido  profundos traumas y  el solo hecho de sentirse perdido hacia que se petrificara.

Mientras que Gerard sentía que Frank era su única debilidad, así es aunque no lo admitía y nunca lo demostrara  Iero era una especie de enfermedad mortal para Way este sabía perfectamente que cada segundo que permanecía junto a Iero, el “veneno” de este se apoderaba més de él, logrando así que sus instintos asesinos desaparecieran cuando estaban en la soledad, pero que surgieran  con toda su furia con tan solo el cantar de alguna avecilla, sentía cierta “paranoia” con respecto a Frank.

Aun así ambos estaba gustosos de aceptar estos “fenómenos internos” aunque pudiesen poner en riesgo sus vidas.

¿Cómo paso? No se dieron cuenta pero en cuando la mesera llego con su orden sus manos estaban unidas.

-Acá están sus órdenes señores..- la mesera noto sus manos unidas, los miro con cierta extrañes para después agregar en su rostro cierto aspecto de asco.

-Estúpida homofóbica…- dijo Gerard después de que esta se retirase.

-Él día es precioso no crees?- seguido de este comentario Frank metió a su boca un pedazo de pastel.

-Si... pero más hermosa será la noche de esta jornada…-

-¿Por qué lo decís?-

Sus ojos se desviaron hacia otra dirección…

-¿ya terminaste?- pregunta algo serio, el abogado Way.

-em..Si...- dice un poco desconcertado.

-Vamos… Pansy espera…- llamo a la hermosa mesera que los atendió, esta se les acercó con cierto desprecio.

-¿Cuánto es?-

-15 dólares…-

 -Toma 20 dólares, quédate con el cambio… así Frank cuando allá una zorra cerca siempre se le deja propina, por mover aunque sea bien el trasero a sus clientes…- este comentario fue escuchado por la joven la cual algo humillada y resentida se alejó algo enojada.

-¿Por qué hiciste eso? Fue muy cruel de tu parte…- dijo el menor aun sentado.

-Cariño, esa es mi especialidad…- dijo pasando su mano a través de su pecho, de un color rojizo se tiñeron sus mejillas, algo ardientes.

-Vamos… antes de que te me enfríes…-lo tomo de la mano y lo guío hasta el auto, por alguna razón Iero solo lo seguía Gerard al parecer había aprendido a manipularlo, con cierta facilidad, pero a su vez el mismo Iero tenía en sus manos al más temido criminal de los estados unidos.

Moonrose.

“La temperatura es de 10 grados, son las 12:03 del mediodía el tráfico esta mañana en   Lawrenceville  está algo congestionado, la policía de los estados de Norteamérica recomienda a  todos los habitantes de New Jersey quedarse en sus casa protegidos les informamos que hoy es noche de luna llena los mejores policías del F.B.I  ya están a cargo, de nuestras calles para tratar de mantenernos seguros”

-Dime por favor que no…- Frank agacha la cabeza esperando una negación por parte de Gerard.

-Si necesitas dinero, saca del banco por si a Pansy le recomienden alguna  medicina o algo así…- trataba de sonar normal por dentro sabía muy bien a lo que se refería Frank, aun así trataba de cambiar el tema.

-No me cambies el tema Gerard…- su vos escucha posesiva y directa.

-Así me conociste niño, no me quieras cambiar porque no lo lograras, te recuerdo el que maneja las situaciones soy yo…- su autoridad es marcada en su acentuación.

-¿Pero... y si te pasa algo?-

-La policía de los estados unidos es demasiado ingenua y muy fácil de burlar, y de ser lo contrario, si en caso me atraparan y no vea salida te prometo que me pegare un tiro en la cien, además si llega a suceder eso toma todo el dinero que encuentre en el banco y te largas de este país…desapareces te compras alguna otra identidad, haz lo que quieras…-

-¿No entiendes verdad?- su mirada se tornó  triste.

A su destino llegaron.

-Si lo entiendo…- tomo entre sus manos la cara de Iero, este solo lo miraba con cierta angustia.

-¿Entonces…? ¿Por qué?-

Una sonrisa se dibujó en sus labios, y sobre las manos de Frank cayeron un juego de llaves correspondiente al departamento.

-Averígualo- bajo del auto y se dentro en lo que es su hogar, pasaron algunos minutos hasta que Frank decidió subir al departamento apara “averiguarlo”
Al entrar a este se dio cuenta que la pequeña Pansy no estaba

-¿Gerard?-

Pregunta extrañado, el departamento parece estar totalmente vació las luces estaban apagadas y en todo el lugar se podía percibir un aroma que solo rosas desprenden al abrirse.

Con lentitud abrió la puerta para encontrarse con…